viernes, 1 de junio de 2018

CRONICA DE LA TERTULIA DE ARTE DEL JUEVES


TERTULIAS DE ARTE EN LA A.A.A. 31 MAYO 2018.  M.ª Rosa Azorín Matesanz.            En la sesión de ayer nuestro protagonista fue el pintor asturiano Evaristo Valle (1873-1951) Muy interesante saber que desde 1981 posee un museo dedicado a él en Gijón, su ciudad natal. Es un artista que utilizó la pintura para representar las gentes, sus costumbres, y el paisaje de Asturias, y lo hizo con total libertad y genialidad. Vemos en sus obras una fina ironía y un toque caricaturesco que lo acercan, sin duda, al gran Goya, del que era admirador. Observamos un cierto eclecticismo, ya que pasó varios años en París y captó las pinturas de las vanguardias del S.XX: modernismo, simbolismo, postimpresionismo… y la de los grandes del Museo del Prado. Tenía la audacia cromática y el primitivismo de Guaguin, y el dibujo y la facilidad para el boceto de Toulouse-Lautrec, sin embargo sus pinturas nos muestran un lenguaje muy personal, subjetivo, entre lo real y lo fantástico, con una gran capacidad de síntesis y expresividad. No pintaba al aire libre, se relacionaba poco  a causa de su enfermedad: sufría de agorafobia y tenía temor a perder el sentido caminando por la calle. A pesar de ello, supo ofrecernos una realidad filtrada por el recuerdo y su propia imaginación. Sus cuadros de carnaval son una mezcla de simbolismo, expresionismo y primitivismo, acercando lo popular, lo más arcaico, lo mágico y el lirismo del pueblo asturiano al espectador. Al final de la sesión, algún contertulio opinó que no era un artista digno de ser analizado y debatido en una tertulia, ya que no le aportaba nada nuevo. Se levantó una polémica en la que las varias opiniones demostraron que, la mayoría  de nosotros, nos sentimos encantados de haber conocido mejor a este artista, español y asturiano. Dejamos claro que todos los artistas, sean nacionales o extranjeros, así como todos los movimientos artísticos, son igualmente bienvenidos a nuestras sesiones de tertulias.  Aquí tenéis una de sus obras: “Carnavalada de Oviedo” 1928, 111x127cm, en ella hay ritmo, hay movimiento, y hay línea y color. En la próxima analizaremos al pintor Antonio Fillol Granell (1870 – 1930)