TERTULIAS
DE ARTE EN LA AAA. 14 JUNIO 2018. MARÍA
ROSA AZORÍN MATESANZ.
La
sesión fue muy amena, con polémica y mucha participación de los contertulios.
Hablamos de una artista española nacida en San Sebastián en 1956, Cristina
Iglesias Fernández Berridi. Dice de sí misma que es una “constructora” ,
cercana a la arquitectura, y, en palabras textuales, “en todas mis obras hay
una estrategia de construcción de lugares de silencio y reflexión” Ha
revolucionado la forma de “hacer” y de “ver” el arte. Ha conseguido proyección
nacional e internacional, y en muchas ocasiones ha trabajado con los
arquitectos más cotizados del momento, realizando intervenciones artísticas. Se
formó en San Sebastián, en Barcelona, en la Chelsea School of Arts de Londres
(donde conoció a su marido, Juan Muñoz, célebre escultor madrileño, ya
desaparecido) y en el Pratt Institute de
New York. Tiene obra en El Museo Reina Sofía y en muchos otros museos de España
y del mundo, Son instalaciones grandes que se presentan como celosías que
forman habitaciones, pasadizos, laberintos, por donde el espectador puede
transitar. También le interesan mucho los lugares abiertos donde crea espacios
públicos que alteran el paisaje e interconectan con el viandante y le invitan a
la imaginación. En 2007 trabajó con Rafael Moneo en la ampliación del Museo del
Prado, construyendo el Portón-pasaje: grandes puertas ceremoniales de planchas
de bronce, que representan una suerte de vegetales fosilizados, creando un
juego de abrir y cerrar la puertas muy interesante. Uno de sus materiales
favoritos es el agua que avanza o retrocede, según el momento del día, por un
lecho construido con bronce a semejanza de raíces, hojarasca, cieno …,
invitando a la memoria del espectador que medite sobre el subsuelo bajo
nuestros pies. Otros trabajos con el agua: “Deep Fountain” en Amberes, “Tres
Aguas” en Toledo, “Arroyos olvidados” en
el edificio Bloomberg en Londres, “A través” en Bombas Gens en Valencia, etc.
En todos se requiere un escuchar el sonido del agua, un meditar sobre el
movimiento y ese entramado en las entrañas de la naturaleza. Son espacios
propicios a la reflexión y, al mismo tiempo, a la comunicación con los demás.
Los contertulios llegamos a la conclusión de que es una artista-constructora,
muy libre, y que no se la puede encasillar en ninguna de las disciplinas
artísticas conocidas hasta ahora. Os dejo la fotografía de dos de sus obras:
una instalación, “The Ionosphere” 2017, Fundación Norman Foster en Madrid, y
una intervención artística “Tres Aguas” 2014, en la plaza del Ayuntamiento de
Toledo. En la próxima tertulia, ya en Octubre, nuestro invitado será el
escultor valenciano Manolo Valdés.
