El color siempre ha sido mi gran compañero: me inspira, me anima y me guía en cada creación. Cuando no sabía qué pintar, simplemente mojaba el pincel en azul, verde o cualquier otro tono… y ese pequeño gesto se convertía en el inicio de un cuadro. Los paisajes, con su alegría y vitalidad, son mi mayor fuente de inspiración. Por eso, en esta exposición predominan los escenarios naturales sobre los urbanos.