Quisiera compartir con todos los
compañeros de asociación mi opinión
sobre el estupendo curso de dibujo que
ha impartido Martigodi, asesorado y ayudado por sus compañeros Luján y Más Calabuig.
Durante
nueve meses, que se dice pronto, he estado con unos estupendos compañeros
de curso con los que me lo he pasado estupendamente, y con unos profesores 10
que se han esforzado en todo momento por intentar compartir con nosotros todos sus
conocimientos, que no son pocos, y sobre
todo por despertar en nosotros la creatividad, que ha sido el caballo de
batalla de este curso.
He asistido a clases magistrales como la de la síntesis, la sincronización mente-lapicero, el encaje de figura en movimiento, etc, que han despertado en mí nuevas ideas y nuevas maneras de interpretar la realidad a través del dibujo. Para mí, los miércoles de 7 a 9 de la tarde han sido una auténtica fiesta. Estaba deseando que llegara el día de la clase de dibujo, no sólo por todo lo que he estado aprendiendo, sino por el estupendo ambiente que hemos tenido en la clase.
Martigodi no es un profesor al uso. Se esfuerza en que aprendamos conceptos y maneras nuevas de interpretar la realidad, y me atrevo a decir que se frustra muchísimo cuando no consigue sacar de nosotros eso que él quiere, lo cual le honra. No se guarda sus trucos para sí, sino que los comparte con los demás, y es muy de agradecer. A eso se suma que es un ejemplo vivo de superación personal digno de ser imitado. Por todo eso quiero darle las gracias por haber compartido con nosotros estos 9 meses y decirle que estoy deseando que llegue septiembre para que empecemos un nuevo curso. Un abrazo a todos y hasta pronto.
He asistido a clases magistrales como la de la síntesis, la sincronización mente-lapicero, el encaje de figura en movimiento, etc, que han despertado en mí nuevas ideas y nuevas maneras de interpretar la realidad a través del dibujo. Para mí, los miércoles de 7 a 9 de la tarde han sido una auténtica fiesta. Estaba deseando que llegara el día de la clase de dibujo, no sólo por todo lo que he estado aprendiendo, sino por el estupendo ambiente que hemos tenido en la clase.
Martigodi no es un profesor al uso. Se esfuerza en que aprendamos conceptos y maneras nuevas de interpretar la realidad, y me atrevo a decir que se frustra muchísimo cuando no consigue sacar de nosotros eso que él quiere, lo cual le honra. No se guarda sus trucos para sí, sino que los comparte con los demás, y es muy de agradecer. A eso se suma que es un ejemplo vivo de superación personal digno de ser imitado. Por todo eso quiero darle las gracias por haber compartido con nosotros estos 9 meses y decirle que estoy deseando que llegue septiembre para que empecemos un nuevo curso. Un abrazo a todos y hasta pronto.
Blanca.