Según Gracián, “lo bueno, si breve, dos veces bueno”, y yo le apostillo “según que y para que”. Y si no que se lo pregunten al que está, o a la que está debajo… Al pasivo o a la pasiva. Al que recibe y le sabe a poco lo breve. Esos@ solo se dan por satisfechos@ con lo más y la más: el mas guapo@, el más listo@, el mejor en todo, la más larga (la crónica, se entiende…) No se conforma con menos de lo que merece, y cree merecerlo todo. Y le gusta que se lo digan, que se lo reconozcan. Ellos@, sí me leen y a ellos@ me dirijo. Por turnos. Cuando a cada uno le toca. Ya te tocará. Yo (el boletín, el blog, la presentación) me debo a todos. Pero sé que no a todos les cae bien lo que escribo y, a veces, hasta lo que no escribo y según ellos@ debía haber escrito. Me gustaría contentar a todos, pero, ya se sabe, "el que escribe se proscribe".
Quizá ésta si la leerán porque es corta.
Carlos Bermejo