OPINION
Quizá alguno de vosotros, os habréis hecho esta pregunta. Los menos seguramente, pero intuyo que alguno se la habrá hecho. Yo se la voy a responder sin acritud y sin señalar a nadie.
Cuando uno se hace esta pregunta, es porque contrapone lo que “él da a la Asociación” y naturalmente se la hace aquel que solo da dinero. Porque el que da algo más que eso, no se la hace. Él sabe lo que le da la Asociación y entiende que debe de aportar también su colaboración solidaria y constructiva, para que la Asociación, su Asociación, siga dándole lo que por si solo él no sería capaz de lograr, aunque multiplicara su cuota por cien.
De todos nosotros es conocida la dificultad de lograr exponer de forma individual, en una sala que tenga las instalaciones y el prestigio como para considerarla una autentica sala de arte. Esta salas, o bien están en manos de entidades corporativa u organismos públicos y en ellas hay criterios de concesión que la mayoría de nosotros no lograríamos alcanzar, o bien son salas privadas que tienen objetivos artísticos, pero a la vez son empresas que pretenden rentabilizar su inversión o prestigio y cobran por ello cantidades prohibitivas que asombrarían a quien por la pequeña aportación de su cuota y un canon reducido tienen la oportunidad de exponer de forma individual ,en una de las mejores (por no decir la mejor) sala de Alicante, como lo son las de nuestro flamante CENTRO DE ARTE.
¿Y cuantos de nosotros tendríamos la oportunidad de exponer una y otra vez en las grandes colectivas que la Asociación logra de los organismo públicos o privados, (en nuestra sala o en las de esos organismos) si no estuviéramos asociados? Ninguno. ¿Y en las grandes colectivas temáticas tales, como el gran formato, el minicuadro, la acuarela, el dibujo y otras, que se organizan en la Asociación con cierta frecuencia? Ninguno, pues solo pueden hacerlo los asociados, mediante la aportación casi simbólica de tres, cinco o diez euros, para compensar el necesario ingreso del canon de sala sin el cual la Asociación y con solo la cuota congelada desde hace seis años, no tendría viabilidad económica alguna. ¿Es mucho el esfuerzo económico el que se le pide al socio por ese concepto? Yo diría que no, aunque comprenda que para alguno y en época de crisis, si lo pueda ser. ¿Son esos los socios que se lamentan o protestan cuando se les pide ese pequeño esfuerzo para el mantenimiento de la Asociación? Esta por ver.
Con lo expuesto y por lo que respecta a las posibilidades de exponer, que para un artista del nivel que sea, son las que le mueven a asociarse, creo que sucintamente esta dicho casi todo.
¿Pero acaso terminan en eso las oportunidades que la Asociación ofrece al socio? Rotundamente, no. Los diversos talleres para formarse o perfeccionarse: tales como Pintura del Natural con Modelo femenino o masculino, único en Alicante; los cursillos intensivos impartidos por los mejores artistas en cada una de las técnicas pictóricas ; las conferencias, charlas, demostraciones y clases magistrales impartidas por grandes artistas y personalidades de la cultura; los viajes turístico-artísticos a diversas poblaciones; las jornadas de pintura al aire libre en varios lugares tales como la Plaza de Gabriel Miró, el Puerto o en algunos pueblos de la provincia; el ver reflejado en éste blog o en el boletin mensual sus exposiciones, sus premios y las actividades en las que participa, son otras tantas de esas oportunidades que no tiene ni tendrán nunca los no afiliados. ¿Habéis visto que las tengan aquellos compañeros que cuando se estaban labrado un nombre en la Asociación, se dieron de baja pensando que lograrían abrirse paso en solitario en su legítima aspiración de dar a conocer su obra…? La mayoría de ellos han quedado marginados del afecto de nuestro compañerismo y no han logrado lo que se proponían.
Por todo lo expuesto, en el fiel de la balanza, la inclinación por el peso es claramente favorable a lo que recibimos de la Asociación. Y si es asi, y queremos que perdure en el tiempo, tenemos que olvidarnos del “gratis total” de la época de las “vacas gordas” en las que exponíamos, nos daban caterig y viajábamos sin coste alguno y hasta nos gratificaban por pintar. Eso ya nos es posible, porque hemos gastado lo ahorros en dotarnos de unas instalaciones modélicas y ahora hay que mantenerlas, a base de pequeñas aportaciones extras para aquellos que utilicen alguno de las servicios que la Asociación les ofrece en nuestro CENTRO DE ARTE. Esto que ahora es asi, es la norma que existe desde siempre en otras asociaciones y club. Uno puede ser socio de un gran gimnasio, pero si quiere utilizar la pista de pádel tiene que pagar: de un club de tenis y por utilizar las pistas tiene que pagar; si quiere tomarse un café o un refresco, tiene que pagar, y asi todo. ¿O es que los socios del Hércules tienen acceso gratis al campo en todos los partidos?
Y aunque no descartamos “volver al gratis total” cuando vuelvan las subvenciones, o cuando lleguemos a los “cuatrocientos”: nueva meta a conseguir para un futuro, es bueno pensar que no todo es cuestión de dinero, y que al margen de ello y eso si, “gratis total”, la Asociación nos proporciona algo que no es posible comprar con dinero como alguien dijo del feliz movimiento de la cola de un perro: la satisfacción moral de sentirse cerca de los que comparten tus mismas inquietudes artísticas y ser parte y uno más de la gran familia de las buenas gentes que formamos la Asociación de Artistas Alicantinos.
Carlos Bermejo
Alicante, 5 de junio de 2012