Después de dos años y dos cursos en los que, altruistamente,
ha regalado su tiempo y sus muchos saberes sobre la materia sin más recompensa que
la satisfacción que produce en las almas nobles el dar sin recibir, MANUEL
MARTINEZ GODINEZ, para el mundo del arte conocido por “MARTIGODI” como pintor y showman,
se ha despedido esta tarde de sus alumnos, en el transcurso de un pequeño ágape
celebrado en el taller donde se ha desarrollado los cursos de dibujo que él ha
dirigido. Y lo ha hecho con la generosidad de su impronta personal llevada al límite,
regalando a cada uno de sus alumnos, uno de sus celebradas y cotizadas acuarelas que harían las delicias de cualquier
coleccionista de arte.
Manolo se
va por razones varias, dejando sembrada en la tierra fértil de sus alumnos. la
semilla del ejemplo de su calidad humanas y personal inasequible al desaliento;
su optimismo contagioso como la mejor de las medicinas, pese a que viene luchando desde hace años contra una
grave enfermedad; y su fino y recatado humor que han hecho de sus clases “la
fiesta de los miércoles” en los que las dificultades técnicas del dibujo
artístico se han ido superando con trazos de risa, perspectivas de futuro y
esbozos de satisfacción cuando se logra encajar la figura en el blanco del
papel.
Adiós
Manolo, adiós; otros vendrán a suplirte, tenemos banquillo para ello, pero el hueco de tu ausencia en el
taller, no lo podrá ocupar nadie.
Carlos Bermejo
Coordinador de talleres de la AAA.
Alicante 1 de julio de 2015
