El francés MARCEL DUCHAMP, (1887-1968) ha pasado a la historia de la pintura moderna por haber
transformado un urinario en obra de arte a la que tituló “LA FUENTE”. Sin
embargo fue algo más que eso, pese a que con su impulso se desarrolló el surrealismo,
el dada y el Pop Art, y toda la pintura vanguardista y camelistica que inundan
ferias de arte, galerías y demás templos donde se da culto al absurdo y se
cuestiona el academicismo en las artes plásticas.
Nacido en el seno de una rica familia, cuya
fortuna la habia conseguida su abuelo materno como agente marítimo, los dos mayores de sus
seis hermanos, él y luego su hermana menor, se decantaron por dedicarse al arte
con el beneplácito de la familia y por influencia del abuelo consignatario que
al retirarse de los negocios, tambien se habia dedicado a las bellas artes.
Su formación academica, fue poca y
accidentada: clases de dibujo en el liceo, intento fracasado de ingreso en la
Escuela de Bellas Artes y clases en una academia privada que abandonó pronto
para dedicarse a vagar por los cafés con
un cuaderno en el que tomaba instantáneas abocetadas de los clientes, para acabar instalándose en el barrio de Montmartre
con uno de sus hermanos, donde a salto de mata fue introduciéndose en las exposiciones
colectivas y viviendo la vida bohemia, pero sin las habituales estrecheces
económicas de sus colegas, pues él gozaba de una sustanciosa asignación a
cuenta de su futura herencia.
En un principio tuvo influencias fauvistas,
cubistas y cezanianas, pero luego se dedicó a inventar nuevas formas de hacer y
ver el arte, a teorizar y a reírse de los que se tomaban el arte en serio.
Hasta el punto de crear tendencias a las que era incapaz de darles nombre y
declararse en contra del arte retiniano
o arte visual, por contraposición a un arte que se aprende desde
la mente, y que se basa en la elección de objetos que le debían resultar
indiferentes visualmente o retinianamente,
aunque tampoco era de su gusto y declaró que se trataba de “jueguecillo entre mí y yo”
Con tan clarificadoras ideas, afianzo el
surrealismo, el dada y el Pop Art y hoy dia sigue considerado como el artista
crucial para la comprensión de la posmodernidad. ¡Tama del frasco carrasco!
Pues bien, este artista francés y por tanto “divino”,
va a ser motivo de análisis siquiátrico más que pictórico, en LA TERTULIA DE
LOS JUEVES de mañana en nuestro CENTRO DE ARTE, que se reúne en sesión abierta
a todos y que dará comienzo a las 19 horas, previéndose un sonoro desconcierto “dadá”.
Carlos
Bermejo
Coordinador
de talleres de la AAA
Alicante,
2 de marzo de 2016