BREVE RESEÑA DEL PINTOR
JULIEN DUPRÉ (1851-1910)
Pintor francés nacido en Paris. Uno de los principales
representantes del realismo francés de la pintura del siglo XIX.
Su obra junto con la
de Bretón y MIllet, ejerció gran influencia en la temática rural del realismo
socialista de la U.R.S.S. y de China.
Hijo del joyero Jean
Dupré y Pauline Boullie, comenzó su vida laboral, como empleado en una tienda
de encajes, antes de entrar en el negocio de joyería de su familia.
El 12 de Enero de
1870 la dictadura de Napoleón III, se convirtió en monarquía constitucional,
ocho meses después, el 19 de Julio, Francia declara la guerra a Prusia (de
1870-1871). Entre el 9 de septiembre y el 19, los prusianos tienen rodeada a la
capital francesa. Con el sitio de Paris, los Dupré tienen que cerrar la tienda
y es entonces, cuando Julien comenzó a asistir a cursos nocturnos de la Escuela
de Artes Decorativas. A través de estos
cursos, obtuvo el acceso a L’Ecole des Beaux Arts. Es decir llegó al arte por
la guerra.
A mediados de la
década de 1870 fue a Picardia y allí se convirtió en un pintor naturalista, de
género rural; se casó en 1876, año en
que expuso su primera exposición en el Salón de Paris.
El admiraba a Jean François
Millet, Bougerau y Jules Bretón y como ellos, pinta muy bien animales, uno de
los mejores de su tiempo, así como a los campesinos, resaltando la luz y los
colores, dio profundidad a su pintura acentuando los efectos y haciendo
resaltar la fuerza de sus obras, y dándole
una importancia a la mujer trabajadora en el mundo rural.
Le gustaba ir a la
campiña, para pintar la naturaleza in situ, peculiaridad que se nota en su obra
con la riqueza de pequeños detalles que resaltan sus obras.
Fue más conocido en
E.E. U.U. donde hay gran parte de sus obras.
Julien Dupré en las
Exposiciones Internacionales de Paris:
A lo largo de toda su
carrera, Dupré defendió la vida de los campesinos y continuó pintando escenas
de ese ámbito de la Normandía a Bretaña, hasta su muerte el 16 de Abril de
1910.
La crítica moderna,
ha reconocido la singularidad de las pinturas de Dupré en la representación de
las heroicas mujeres campesinas francesas, siempre ataviadas o pintadas con
vivos colores, fuerza y expresividad, pero llenas de glamour, arrojando el heno
con energía masculina. Viendo sus cuadros alineados, es como si fueran
fotogramas de un documental.
“ Pintor singular,
individual en su trabajo, preciso en su calidad de observador, serio como un
pintor, sano en sus instintos e intensidad artística, en sus impresiones y
traducción de ellas…..siempre es una de las a atracciones del Salón,” (
Palabras de Marion H. Speilman, en su artículo titulado “La vaca blanca” de la
Revista de Arte, 1891.
Sin duda un magnífico
artista.
Pedro Ortiz